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Channel: In fashion with you - Moda, estilo de vida, reflexiones y cosas bonitas

Dime cómo te sientes y te diré qué puedes leer este finde

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Si tienes ganas de reírte leyendo una buena historia, no te pierdas este post del Guardián. Es viejo (de 2012), pero yo lo leí hace unos días por primera vez y me reí mucho. Solo os diré que mezcla a una inglesa algo alcohólica con Beyoncé, y todo ello tamizado por su particular manera de contar las cosas. Perfecto para pasar un buen rato.

Si te encanta pintarte las uñas pero de tanto hacerlo se han vuelto amarillas, lee estos consejos para mantenerlas blancas por más tiempo y evitar que amarilleen. A mí me han resultado interesantes, sobre todo porque desmienten algunas creencias que yo seguía a rajatabla, como lo de que hay que dejar descansar las uñas al menos 24 horas antes de maquillarlas de nuevo.

Si estás planeando un viaje a Nueva York, te dejo dos posts: este de Lucía Be, tan genial como la propia Lucía, y este de Cristina, con todo lo que aprendió (y descubrió) durante su viaje a la gran manzana.

Si te cuesta combinar la ropa por las mañanas, es porque no buscas inspiración donde deberías. En este artículo de Vogue.es te dan el secreto para conseguir las mejores combinaciones con la ropa que tienes en el armario, que no es otro que cotillear en las tiendas online de marcas como Zara, & Other Stories o Cos y copiar los estilismos que proponen ellos para la ropa que venden. Funciona. (Y si no, aquí cinco combinaciones que no fallan nunca)

Si te gustan los posts con rutinas de belleza, te recomiendo el beauty uniform de la fotógrafa Nicki Sebastian en Cup of Jo. Me pareció una chica muy normal y me encantó su estilo desenfadado y lo sonriente que sale en las fotos. :)

Si quieres pasarte el finde leyendo libros que cambiarán tu vida, mira los ocho libros que recomienda Nuria Pérez en el blog de Hello! Creatividad. El año del pensamiento mágico, de Joan Didion, lleva meses y meses en mi lista (para muestra, un botón) y Todos deberíamos ser feministas, de Chimamanda Ngozi Adichie, también figura entre las primeras posiciones de libros de no ficción que quiero leer en cuanto acabe los exámenes. No estoy tan de acuerdo con Chesil Beach, de Ian McEwan, que me pareció un poco raruno, ¡pero a cada uno le cambia la vida un libro! Sobre gustos no hay nada escrito. A mí por ejemplo me tocó mucho la fibra sensible La elegancia del erizo y sé de muchísima gente a la que ni fu ni fa. Otro nuevo de no ficción al que le tengo muchas ganas es Yo sé por qué canta el pájaro enjaulado, de Maya Angelou (cuyo texto "He aprendido" es mi mantra para muchas cosas en la vida). Y ya que hablamos de libros, creo que no os he recomendado lo suficiente A la caza del amor, de Nancy Mitford. Si os gusta Jane Austen, os encantará, y además os reiréis muchísimo. Yo lo leí hace ya un par de meses, pero mi hermana Laura se lo acaba de terminar y el otro día nos reíamos las dos a carcajadas comentando algunas de las jugadas de las Mitford. No puedo ser más fan.


¿Qué planes tenéis para el finde? Yo voy a empollarme bien la cartelera porque la semana que viene es la Fiesta del cine y, aunque sea un día, quiero aprovechar, ¡que hace mucho que no voy al cine! ¿Habéis visto algo interesante últimamente? ¿Me recomendáis alguna peli?

Muy buen fin de semana para todos. :)


9 cosas que me han gustado esta semana

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Foto vía Tumblr

Entre libro y libro, apuntes y apuntes y trabajo y trabajo, esta semana he encontrado algunos huecos para leer artículos muy interesantes en Internet o dejarme arrastrar por pequeñas vorágines de cosas bonitas que me han dado la vida. Hoy las comparto con vosotras.



1. Este look de J.Crew (que muchas ya habréis visto porque compartí en Facebook inmediatamente).



2. Este artículo de S Moda sobre la película que se estrenará dentro de 100 años y que ninguno de nosotros llegaremos a ver jamás. Me hizo reflexionar tanto en el poder de la publicidad (está patrocinada por una marca de coñac) como en si no se nos está yendo demasiado la pinza con la exclusividad y el querer ir siempre un paso más allá. (¿Opiniones? ¡Me encantaría escucharos!)

3. Los looks de Kirsten Dunst durante estos primeros días de Festival de Cannes.

Kirsten Dunst en el Festival de Cannes 2016

4. Este post de Lara con todas las cosas que está aprendiendo a sus casi treinta años. Como siempre, lo mejor de Lara es la sinceridad y cercanía con que cuenta las cosas y la facilidad que tiene para reflexionar sobre asuntos del día a día. (A mí al hacer 25 también me dio por ponerme filosófica)

5. Este otro artículo de S Moda sobre el concepto de "hygge", también conocido como el secreto de la felicidad de los daneses. Me encanta la idea, porque yo cada día estoy más convencida de que para ser feliz hace falta muy poquito.

6. El pouch Cherry Blue de Zubi, inspirado en la primavera japonesa "con las flores floreciendo por todos lados y el almendro impactando sobre el cielo azul", como ellas mismas explican. (Sigue en mi lista de caprichos, por si alguien quiere hacerme un regalo bonito)



7. Este post de Cup of Jo con algunos consejos y experiencias para sobrellevar una relación a distancia. Me gustó porque yo de esto también sé bastante, y me hizo gracia que coincidiéramos en lo necesario que es, al hablar por teléfono o Skype, no solo centrarse en cosas serias y profundas, sino también hablar de todas las tonterías triviales que se te van ocurriendo.

8. Que Jojo Moyes haya mencionado a Nancy Mitford en Yo antes de ti.

9. Regalarme un ratito en la tarde del jueves para escribir esta lista.

¿Y a ti qué te ha gustado esta semana?


Muy buen finde para todos. ;)

Volver

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Foto vía Tumblr

Volver.

A devorar revistas. A leer libros. A pasear entre los estantes de la biblioteca con el único propósito de elegir un nuevo libro para leer. A planear viajes. A llenar la pared de post-it con citas de libros.

Volver.

A dormir más de 6 horas. A tomar té. A sentarse en el sofá a ver la tarde pasar. A no hacer nada. A ver un capítulo tras otro. A las comedias románticas. A Nuestros amantes.

Volver.

A pisar el césped mojado con los pies descalzos. A comer sushi. A tomar helados. A beber granizados de limón. A encender el ventilador. A salir a la terraza por la noche para aprovechar hasta la más mínima corriente de aire.

Volver.

Al blog. A escribir. A perder el miedo a la pantalla en blanco. A ser yo misma.

Volver.

A respirar. A relajarme. A no agobiarme por el futuro. A aceptar lo que llegue.

A seguir soñando.

(Volver, siempre volver)

PD. Solo los valientes.

Qué llevar en la maleta para acertar en tus viajes

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Todas las fotos son deFashion Me Now

En esta última semana me he dado un auténtico atracón de blogs y revistas que llevaba sin leer o cotillear desde hacía, literalmente, varios meses. Tanto estudiar o leer libros de lectura obligada me habían mantenido alejada de Telvas, Vogues, Elles y demás blogs de estilo que solía seguir.

Entre estos últimos hay uno que me gusta especialmente: Fashion Me Now, el blog de la británica Lucy Williams, en el que enseña cómo viste cada día y nos lleva de paseo alrededor del mundo (porque si hay algo que esta chica hace es viajar sin parar). Ayer, mirando las fotos de sus últimos viajes a Montenegro y Lisboa me di cuenta de cuál es su secreto para ir siempre bien vestida, con estilo y con combinaciones sencillas pero ganadoras.




Su secreto es... meter en la maleta, única y exclusivamente, ropa en dos colores: blanco y negro. Partes de arriba blancas, pantalones negros, y viceversa. Así se asegura de que, combine como combine la ropa, le va a quedar bien siempre. Únicamente se permite concesiones más allá del binomio blanco-negro en el color azul del tejido vaquero, que usa mucho en cazadoras, minifaldas y vaqueros largos rectos.











Yo ya me he apuntado el truco para próximos viajes y escapadas. ;)

Y vosotras, ¿cómo hacéis la maleta cuando os vais de viaje? ¿También sois de meter ropa en una sola gama de colores o lo dejáis más al azar? A mí me encantaría poder dejarlo más al azar, pero no soy especialmente creativa a la hora de combinar (y acertar), así que cuanto menos me complique la vida, mejor.

Libros que quiero leer este verano

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Me gusta tanto leer y tengo tantos libros pendientes por leer y descubrir que, cada vez que termino uno y tengo que decidir cuál empiezo, se apodera de mí una pequeña ansiedad. ¿Cuál, de todos, escojo ahora? ¿Y si el que elijo no es tan bueno como el que acabo de terminar? ¿No sería mejor leer algo totalmente diferente, cambiar de registro? ¿Y si no me gusta? Os parecerá una tontería, pero me pasa.

Tanto ha sido así esta última vez que, desde que terminé Yo antes de ti hasta que hace unos días, por fin, empecé otro, han pasado más de dos semanas. Yo antes de ti me dejó un pequeño vacío y no estaba segura de qué sería mejor leer a continuación. Finalmente, el elegido fue Cómo se hace una chica, de mi querida Caitlin Moran, porque sé que me va a hacer reír y que va a ser muy diferente al best-seller de Jojo Moyes. Os iré contando qué tal. De momento me está gustando, pero me quedo con Cómo ser mujer.

También en mi lista para este verano que acaba de comenzar están el último de Marc Lévy en bolsillo, Los límites de nuestro infinito (Marc Lévy siempre, ya sabéis), Sheila Levine está muerta y vive en Nueva York, de Gail Parent, que he leído que es divertidísimo, Mansfield Park, de Jane Austen, para volver a disfrutar con sus inteligentes diálogos en una edición preciosa de Penguin, y Tokio Blues, de Murakami, porque nunca he leído nada de él y me han dicho que este es el mejor para empezar.

Además, quiero comprar (y leer) The girls, de Emma Cline, de la que he leído muy buenas críticas, Donde los escorpiones, el nuevo de Lorenzo Silva, que me encanta, y Todas deberíamos ser feministas, de Chimamanda Ngozi Adichie, y coger en la biblioteca la saga de Elena Ferrante, que vi que la han traído nueva y también me apetece mucho leer.

¿Qué estáis leyendo? ¿Algún libro que os haya gustado últimamente? Me encanta que me recomienden libros. :)

Allí donde siempre es verano

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Foto vía Tumblr

"Me estoy colocando solo de pensar en un hecho asombroso: que por encima de las nubes siempre hace sol. Siempre. Que absolutamente todos los días de mi vida han sido, en el fondo, días soleados. Por muy mal tiempo que hiciera en Wolverhampton y por mucho que lloviera, incluso esos días en que parecía que las nubes se te iban a caer encima y las alcantarillas tenían que hacer gárgaras para digerirlo todo, aquí arriba siempre ha hecho sol.

Siento como si hubiera salido volando a mil kilómetros por hora derecha hacia la metáfora más hermosa de mi vida: si vuelas lo bastante alto, si subes por encima de las nubes, allí siempre es verano.

Decido que, durante el resto de mi vida, al menos una vez al día, me acordaré de esto. Creo que es el pensamiento más alentador que he tenido jamás".

- Caitlin Moran


Si vuelas lo bastante alto, si subes por encima de las nubes, allí siempre es verano.
Es para copiárselo en un post-it y leerlo cada día.

PD. Porque todas las nubes tienen un lado plateado. (Los ingleses y sus reflexiones sobre el tiempo ;)

La semana de los viajes (II)

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La semana que viene me voy de vacaciones (¡bieeeen!), así que he decidido que, para ir ambientándome, esta semana será temática en el blog y estará dedicada a los viajes, esos oasis pasajeros de felicidad que rompen con la rutina y nos insuflan vida para retomar la realidad con energías renovadas.

Si os apetece, estáis más que invitados a viajar conmigo. :)

Guía de Lyon: lo que no te puedes perder

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En la orilla del Ródano (todas las fotos son mías:@_marta_pa)

Hace unos días, recibí un whatsapp de mi amiga Bea en el que me decía que en agosto se irá unos días a Lyon (¡a mi Lyon!) para ver a una amiga suya que está pasando unos meses allí. Me escribía para que le recomendara cosas: monumentos, sitios que ver, dónde comer... A mí me pilló en pleno catarrazo veraniego (sí, estas cosas pasan), y le dije que en cuanto me recuperara le hacía una lista. Un par de días después, Virginia me escribió por Instagram para pedirme exactamente lo mismo. Demasiada casualidad, pensé. Creo que el universo quiere que escriba por fin, cinco años después, una guía de todo lo que descubrí cuando viví en Lyon y con lo que me reencontré hace unos meses cuando volví.

Así que aquí va: una guía de Lyon, esa ciudad que me robó el corazón hace unos años y que siempre ocupará un lugar muy especial en mi vida. He intentado recopilar todos los sitios que merecen la pena, pero esta, más que otras guías que he escrito, es una guía personal, porque en ella os voy a hablar de todos los sitios que a mí me hicieron especialmente feliz y que por eso recuerdo con tanto cariño. Precisamente por eso, seguro que paso por alto restaurantes de calidad (yo era Erasmus, no tenía dinero) o ciertas tiendas (insertad aquí el mismo paréntesis de antes), pero no leeréis nada que no haya vivido, paseado o memorizado hasta la saciedad. Y eso es lo que la hace tan personal.

Sentimentalismos aparte (y ya me dejo de tanto rollo introductorio), Lyon es una ciudad que merece mucho la pena. Considerada la capital gastronómica de Francia, prácticamente todo el centro de la ciudad es Patrimonio de la Humanidad, y tiene un tamaño perfecto para recorrerla en un fin de semana o en un puente largo.

Sin más dilaciones, os dejo con mi guía de Lyon, en la que os hablo de todos los sitios y monumentos que tenéis que ver, os doy algunas ideas de excursiones por la zona y os cuento cuál es la calle de la Presqu'Île en la que mejor se come de todo Lyon...


Vistas del Ródano desde el Puente de la Guillotière
Vistas del Ródano desde el Puente de la Guillotière

CÓMO ES LYON

El centro de Lyon, lo que está clasificado como Patrimonio de la Humanidad, lo componen cuatro zonas: el Vieux Lyon, que es el barrio medieval y renacentista, situado a orillas del río Saona, al pie de la colina de Fourvière; la Croix-Rousse, que es otra colina de la ciudad, esta en la misma Presqu'Île; la colina de Fourvière, donde se encuentra el Teatro Romano y también la preciosa basílica Notre-Dame de Fourvière; y la Presqu'Île, el auténtico centro de Lyon en la actualidad, así llamada porque es casi una isla, ya que está rodeada por los ríos Ródano y Saona pero al mismo tiempo unida al resto de la ciudad por la Croix-Rousse.

Al otro lado del Ródano están los arrondissements (distritos) donde vive la mayoría de la gente: la Part-Dieu, Guillotière, Gerland, Brotteaux, las universidades, etc. Para cruzar, hay muchísimos puentes, y realmente merece la pena cruzarlos al menos una vez para admirar el Ródano en todo su esplendor.

Basílica de Notre-Dame de Fourvière
Basílica de Notre-Dame de Fourvière

QUÉ VER

¿Por dónde empezar a recorrer una ciudad en la que 427 hectáreas (o sea, 427 campos de fútbol) están clasificadas como Patrimonio Mundial de la Humanidad? Todo depende de dónde os alojéis. Yo aquí poco puedo ayudaros pero, si os sirve, la última vez que fui me quedé en los Appart'City Lyon Part-Dieu Garibaldi. Los elegí porque están en la zona que yo más controlo (porque es por donde estaba mi residencia cuando viví allí) y porque, aun sin estar en pleno centro, están a solo tres paradas de metro de la place Bellecour.

Tanto si os alojáis en la Presqu'Île como en alguno de los barrios al otro lado, os recomiendo que, al menos una vez, crucéis por cualquiera de los puentes, os detengáis un momento en el medio, miréis el Ródano y os dejéis llevar. Es una sensación genial.

Ya en la Presqu'Île, no os podéis perder la place Bellecour, corazón de la Presqu'Île, centro neurálgico de Lyon y una de las plazas peatonales más grandes de Europa. Desde Bellecour mirando a Fourvière, a la izquierda está la Rue Victor Hugo, que desemboca en la encantadora plaza de Perrache. Si seguís más hacia la izquierda, llegaréis a la Confluence, una zona que se ha puesto muy de moda ahora, pero que yo apenas conozco porque hace cinco años aún no estaba construida.

Desde Bellecour hacia la derecha (hacia arriba), está la Rue de la République, en la que encontraréis todas las grandes cadenas de ropa y que es perfecta para pasear sin más objetivo que dar una vuelta por République. Subiendo por République os toparéis con el majestuoso edificio de la Cámara de Comercio e Industria de Lyon. Siguiendo hacia arriba llegaréis a la Ópera y al Hôtel de Ville.

Desde la plaza de la Ópera podéis acceder fácilmente a las larguísimas calles empinadas de la Croix-Rousse, en la que especialmente os recomiendo la Montée de la Grande-Côte, una de las calles más especiales de Lyon, llena de casitas medievales antiguas y ahora plagada de cafés cuquis y tiendas de artesanos de la ciudad.

Volviendo a la zona de la Ópera, la entrada del Hôtel de Ville está en la place des Terreaux, una plaza grande muy bonita en la que también se encuentra el Museo de Bellas Artes de Lyon. Os recomiendo que entréis a ver el claustro interior que da entrada a las colecciones. Tiene bancos para poder sentarse y es muy bonito (si vais al mediodía, veréis que muchos estudiantes y trabajadores se cogen su comida y se la comen allí dentro).

Iglesia de Saint-Nizier
Iglesia de Saint-Nizier, en la Rue de Brest

Desde Terreaux parte hacia abajo, paralela a République, mi calle favorita de toda la ciudad: la Rue de Brest. No es la más majestuosa, ni la más antigua, ni en la que más tiempo pasé, pero es mi preferida. Tiene un encanto que la hace muy especial. En ella os toparéis con la preciosa iglesia de Saint-Nizier, ubicada en una replaceta en la que hay varias tiendas que me encantan: la librería Passages, una tienda de decoración cuyo nombre no recuerdo y la zapatería Stock 28, con zapatos a muy buen precio. Bajando un poco más están la Place des Jacobins, con otra fuente inmensa, y el Théâtre des Célestins, y ambos merecen la pena.

Una vez recorrida la Presqu'Île, cruzamos el Saona en dirección al Vieux Lyon. Lo mejor es cruzarlo por el puente que cae justo a la altura de Bellecour, que te lleva directo a la estación donde se coge el funicular para subir a Fourvière. Se puede subir andando perfectamente, pero si no queréis cansaros, el funicular es una buena opción (la subida es considerable). La basílica de Fourvière recuerda por fuera a la de Sacre-Coeur, en París, pero por dentro no tiene nada que ver. ¡Es mucho más bonita! En la colina de Fourvière están también los restos del Teatro Romano, que se adivina gigante... No hay que olvidar que Lyon fue la capital de las Galias, tenía gran importancia durante el Imperio Romano.

Desde allí, si se baja a pie, se vuelve al Vieux Lyon, concretamente a la zona de la iglesia de Saint-Georges. En el Vieux Lyon, no os podéis perder la catedral de Saint-Jean, pero se trata sobre todo de callejear por esas calles diminutas y admirar la arquitectura medieval que aún sobrevive, así como los famosos traboules, pasajes que atraviesan los patios interiores de varios edificios, permitiendo así pasar de una calle a otra cruzando el interior de la manzana.

Personalmente, os recomiendo recorrer el Vieux Lyon entero hasta el final, en la iglesia de Saint-Paul, para volver a cruzar a la Presqu'Île por la Passerelle Saint-Vincent, una de las más bonitas de la ciudad. Además, esa pasarela desemboca en un edificio que contiene uno de los múltiples trampantojos que existen en Lyon. Se llama le Fresque des Lyonnais, y está dedicado a lyoneses ilustres (Rue de la Martinière).

Vistas de la orilla del Saona desde la Passerelle Saint-Vincent
Vistas de la orilla del Saona desde la Passerelle Saint-Vincent

DÓNDE COMER

Como os he comentado antes, a Lyon se la conoce como la capital gastronómica de Francia (¡alberga más de 2.000 restaurantes!). La ciudad tiene una tradición culinaria muy especial, representada en los clásicos bouchons que pueblan el Vieux Lyon de especialidades como la quenelle, el saucisson brioché o la ensalada lyonesa.

Además de probar cualquiera de los bouchons del Vieux Lyon, que tienen mucho encanto por la zona en la que están situados, en la Presqu'Île la mejor calle para comer es la Rue Mercière. Está, literalmente, llena de restaurantes, desde el principio hasta el final. Yo he probado varios y todos me han gustado, así que no puedo recomendaros ninguno en particular. Por el día la calle es algo anodina, pero por la noche es preciosa porque se encienden las bombillitas de colores que cuelgan de un lado a otro, dotándola de un ambiente festivo muy acogedor más propio de un pueblo pequeño que de una gran urbe como es Lyon.

IR DE TIENDAS

Las mejores tiendas están en la Presqu'Île, concentradas en la Rue du Président Edouard Herriot, la Rue de la République y la Places des Jacobins. Tenéis todas las grandes cadenas internacionales (Inditex, H&M...), además de marcas francesas como Vanessa Bruno, Sandro o Maje.

Además, en la Croix-Rousse hay muchas tiendas vintage, y en el Vieux Lyon tenéis tiendas de recuerdos o de cosas curiosas.

Parque de la Tête d'Or
En el Parque de la Tête d'Or

PARQUE DE LA TÊTE D'OR

Algo alejado del centro está el parque más importante de Lyon, el Parque de la Tête d'Or. Es uno de los más grandes de Francia y cuenta, entre otras cosas, con un jardín botánico, un lago y un zoo que se puede visitar libremente, además de con amplias explanadas de hierba para tomar un picnic o relajarse. A mí me encantaba ir a pasear allí para hacer algo de ejercicio o simplemente desconectar de la rutina. Si estáis más de dos días en la ciudad, yo me acercaría, os gustará mucho. (¡Y si vais con niños yo iría de cabeza al zoo!)

EXCURSIONES POR LOS ALREDEDORES

Si vuestra estancia en Lyon se va a prolongar más de 3 o 4 días, yo os recomendaría alguna escapada por la zona. Francia es un país precioso, y muy cerca de Lyon hay ciudades y pueblos con mucho encanto que bien merecen una visita. Entre ellos, yo recomendaría (principalmente por la cercanía) Grenoble, una ciudad pequeña al pie de los Alpes y a una hora escasa de Lyon. Se puede recorrer en un solo día, y a mí me gustó mucho.

También cerca está Ginebra, ya en Suiza, en la que yo pasé un frío de mil pares de narices pero que imagino que con el buen tiempo será más agradable y acogedora. Sin irnos demasiado lejos todavía, encontramos Annecy, conocida como la Venecia francesa por los canales que surcan el pueblo. ¡Es muy bonita! Y el lago es espectacular. Si vais en otoño, una excursión que también merece la pena es acercarse a los viñedos del Beaujolais, al norte de Lyon, para ver las viñas y degustar los famosos vinos de la región. Y como ciudad bonita, aunque está ya un poco más lejos, yo destacaría Dijon, la ciudad de la mostaza. Tiene un casco histórico lleno de casitas medievales que a mí me encantó.

*********

Aunque me parecía imposible, me he descubierto a mí misma escribiendo esta guía prácticamente de memoria, casi sin mirar Google Maps ni buscar los nombres de nada. Tengo Lyon grabada a fuego en mis recuerdos esenciales, tanto que probablemente tenga una isla de la personalidad propia en mi cerebro, de la que formen parte tanto la ciudad como esos grandes amigos que hice durante aquellos meses y que aún conservo, aunque no nos veamos ni hablemos a diario, así como todo lo que aprendí, las experiencias que viví y lo que crecí como persona.

Así que por favor os lo pido, si vais a Lyon y no os gusta u os deja indiferentes, no me lo digáis. ;)


PD 1. Sobra decir que cualquier duda personal que se os haya quedado en el tintero, podéis mandarme un email y os responderé encantada.


PD 3. Más guías de ciudades: Zaragoza, Asturias, París, Londres, Munich y Salzburgo.

Viajar

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Viajar es dormir en camas pequeñas y tener que usar baños diminutos. Viajar es un televisor viejo y una conexión a Internet lenta. Viajar es mantener conversaciones extraordinarias con gente la mar de corriente. Es descubrir que camareros, caseros y trabajadores de gasolineras pueden ser las personas más interesantes del mundo. Es toparse con iglesias cautivadoras que te invitan a entrar. Es McDonald’s siendo un lujo. Es darte cuenta de que a lo mejor has nacido en el país equivocado.

Viajar es una sonrisa que lleva a una conversación en un inglés improvisado. Es la epifanía de que las chicas bonitas sonríen igual en todas las partes del mundo. Viajar es dejar propinas del 10% y sentirte bien acogido por ello. Viajar es llevar la misma camiseta blanca día tras día. Viajar es sexo con acento extranjero después de una buena botella de vino y demasiados cigarrillos sin filtrar. Viajar es desplazarse en la parte trasera de un autobús con extraños que no paran de reírse por cualquier tontería. Es una calle llena de mochileros barbudos que estudian sus mapas con detenimiento. Viajar es desear un poquito más de lo que sea que eso fuera. Es compartir una botella de licor en un tren nocturno con un nuevo amigo. Es “A lo mejor no tengo que hacerlo así cuando vuelva a casa”.

Traducido y adaptado por mí a partir del texto de Nick Miller Isn’t It Pretty to Think So?


Y para ti, ¿qué es viajar?

Encontrar tiempo

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Foto vía Tumblr

Hace unas semanas (unas cuantas, en realidad), una compañera de trabajo mencionó, durante una formación que tuvimos, lo importante que es tomarse tiempo para dedicarlo a aquellas cosas que nos gustan y nos hacen felices. Lo hizo después de que todos los demás, preguntados por nuestras aficiones, hubiéramos dicho cosas del tipo "Me encanta leer, pero no tengo tiempo para hacerlo", "Bailar es una de mis grandes pasiones, pero no consigo encontrar ratos para dedicarme a ello", "Casi no tengo tiempo ni para jugar con mis hijos, que es de las cosas que más me llenan", y demás confesiones por el estilo. Entonces ella, argentina de nacimiento, nos reprendió con voz melosa: "Deberíais hacer el esfuerzo de encontrar tiempo para cultivar vuestras aficiones. De verdad que es importante".

Y tiene toda la razón del mundo, para qué vamos a decir otra cosa. La vida se ve de otra manera después de leer, de ver una película, de hacer deporte, de jugar con tus hijos, de salir a correr, de pintar, de hacer punto, de estar tirada en el sofá. 

Pero yo, desde el 1 de septiembre y hasta hoy, 2 de diciembre, no había encontrado el momento de volver a sentarme delante del ordenador para escribir aquí. De hecho, casi hasta se me había olvidado escribir. A lo mejor os suena dramático, pero es bastante cierto.

No obstante, hoy, con un maravilloso puente de cuatro días por delante, he encontrado tiempo para pasarme por el blog a decir :"Hola, ¿qué tal estáis?". El resto de explicaciones ya las daré más adelante.

Os he echado de menos. :)

Como dice mi querida Maddalen, volveré. No sé cuándo, pero volveré.


Mi vida, ahora mismo

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Este es, más o menos, mi uniforme de lunes a viernes, bolsa de tela y café malo de máquina incluido (foto vía ARDW)

Como hace tanto que no paso por aquí regularmente y os prometí una pequeña explicación, hoy os voy a contar, a grandes rasgos, cómo es mi vida desde el pasado mes de septiembre. Así que, más o menos, si me hubieran estado grabando con una cámara en modo Keeping up with the Kardashians, me habrían encontrado tal que así...





Cambiando...

De profesión.

Y de una manera bastante radical, además, ya que he cambiado el mundo de la comunicación, las redes sociales y la publicidad por el de la educación. Dicho de otro modo, llevo desde septiembre trabajando como profesora en un colegio. Y, básicamente, ese es el principal motivo por el que no he tenido tiempo para actualizar el blog. Paso todas las mañanas -y alguna que otra tarde- en el colegio, y luego en casa tengo que preparar las clases, estudiar bien las materias, corregir, programar, preparar trabajos... Es verdad que todos podemos encontrar tiempo si nos lo proponemos, pero no es menos verdad que yo este trimestre he pasado muchos días trabajando en casa hasta la medianoche sin haber parado ni un segundo.

Respecto a si me compensa o no, a final de curso os diré. Por el momento, he tenido días muy duros, de llegar a casa enfadada, frustrada y triste porque trabajar con adolescentes puede ser realmente complicado. Pero también es cierto que muchas veces me río con ellos -y de ellos un poquito también-, otras veces me sacan una sonrisa y, de vez en cuando, aprenden algo. Y me siento bien por estar contribuyendo un poquito a crear una sociedad mejor.

Viendo...

Ahora mismo estoy acabando la segunda temporada de Lovesick, que me encanta porque es una comedia romántica con humor británico y de capítulos cortos, perfectos para desconectar 25 minutos y seguir con la faena. También estoy viendo The Crown, una serie buenísima sobre la época en que Isabel II fue coronada reina de Gran Bretaña. Es genial, os la recomiendo muchísimo. Y no me puedo olvidar de Notorious, que se centra en la relación entre un abogado y una productora de noticias. No recibirá grandes premios, pero engancha mucho y siempre te deja con ganas de más.

Leyendo...

La semana pasada terminé Instrumental, la autobiografía de James Rhodes (al que por cierto vi en concierto el mes pasado y qué maravilla), y aún sigo con Los buscadores de conchas, de Rosamunde Pilcher, porque lo estoy saboreando y disfrutando muchísimo. Me encanta cómo describe los sentimientos de sus personajes y cómo recrea los paisajes ingleses, todo muy al estilo de mi querida Jane Austen.

Escuchando...

De la lista de Instrumental en Spotify (buenísima) he pasado a escuchar en bucle uno de mis discos de villancicos favoritos, A Very She & Him Christmas, del dúo She & Him, formado por la adorable Zooey Deschanel y el músico M.Ward, cuya canción Primitive girl es una de mis 50 razones para vivir.

Deseando...

Que lleguen las 14.30 h de mañana jueves para empezar las vacaciones de Navidad que, esta vez sí (el lado bueno de ser profe), van a ser muuuy largas. :)

Preparando...

Un viaje a Berlín para la semana que viene. ¿Alguna recomendación de sitios que visitar, cosas que hacer, cafeterías para tomar cafés que calienten el alma o restaurantes buenos, bonitos y baratos? ¡Gracias por adelantado!


¿Cómo ha sido vuestra vida últimamente? Espero que hayáis estado bien y que sigáis mejor aún.

Por si no me paso por aquí antes (aunque nunca se sabe), muy feliz Navidad para todos. :)

8 escritoras para leer en 2017

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Fotos vía Tumblr

Hace unos días terminé de leer Los buscadores de conchas, de Rosamunde Pilcher, y, como me pasa siempre que acabo algún libro que me gusta, tengo que pensar muy bien la lectura que vendrá después porque, si no está a la altura, corro el peligro de llevarme una decepción.

En este proceso de decidir qué nuevo libro leer me encontraba cuando decidí hacer una lista con autores que tengo ganas de leer este año, ya sea porque no he leído nada de ellos hasta ahora, porque los descubrí estudiando literatura y me quedé con ganas de profundizar en ellos o porque quiero repetir. Al acabar la lista, me di cuenta de que, con la excepción de Jeffrey Eugenides, todas las demás escritoras que logré reunir son mujeres. Así que aquí va una recopilación de (grandes) autoras que me encantaría leer en 2017.





1. Zadie Smith: la conocía de ojear sus libros en los estantes de la biblioteca, pero nunca había leído nada de ella ni me había interesado demasiado. Sin embargo, hace unas semanas me topé con esta entrevista que le hizo Eugenides y me enamoró su visión del mundo, su estilo y su forma de expresarse.

2. Dorothy Parker:si Caitlin Moran la considera un referente, por algo será. Cuentista, dramaturga, humorista, ingeniosa y de pluma afilada, su preciosa colección de cuentos Colgando de un hilo me espera desde hace ya demasiados meses.

3. Margaret Atwood: es una de las escritoras actuales más prolíficas, y siempre ojeo sus libros en las librerías sin decidirme nunca a empezar uno. ¿Alguna recomendación?

4. Alice Munro: la tengo pendiente desde que ganó el Nobel hace unos años y DeBolsillo empezó a editar sus cuentos en unas ediciones preciosas con unas portadas ilustradas que dan ganas de coleccionar.

5. Edith Wharton: a Edith Wharton la estudié el año pasado en Literatura norteamericana del siglo XX. Leí un relato suyo, "Roman Fever", y me encantó cómo, en un espacio tan corto, aborda y refleja tan bien la relación entre dos mujeres. Llevo desde entonces queriendo leer La edad de la inocencia, una de sus obras más conocidas.

6. Maya Angelou: saberme el título de su obra autobiográfica, Yo sé por qué canta el pájaro enjaulado (que en España editó Asteroide hace solo unos meses y que lleva en mi lista de deseos de Amazon desde ese mismo día), me ayudó a sacar muy buena nota en una asignatura de la carrera, así que es normal que a esta escritora feminista que tanto ha luchado por la igualdad de las mujeres afroamericanas le tenga un especial cariño. ¿Otra razón para leerla? Este texto tan maravilloso.

7. Joan Didion: El año del pensamiento mágico o Noches azules son dos de las obras de esta escritora norteamericana que también llevo tiempo queriendo leer. Y a ellas se acaba de sumar Según venga el juego, que saldrá a la venta la semana que viene con una portada de esas que no puedes dejar de mirar.

8. Chimamanda Ngozi Adichie: de ella leí este verano Todos deberíamos ser feministas, un pequeño ensayo en el que desgrana las razones por las que todos, hombres y mujeres, deberíamos apoyar la causa del feminismo. Ahora en mi lista está Americanah, de la que una de mis mentoras literarias habla maravillas.

¿Me recomendáis a alguna otra autora (o autor ;)? ¿Qué estáis leyendo ahora mismo? Yo he empezado Alguien, de Alice McDermott, y debo decir que me he sumergido bastante en esa serie de recuerdos inconexos con Brooklyn de fondo y en esa forma de narrar tan particular que tiene esta escritora.

Dime cómo te sientes y te diré qué puedes leer este finde

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Si quieres descubrir a una de mis escritoras favoritas y coger ideas sobre qué leer este año, no te pierdas (aquí viene el momento autobombo) el post que escribí para Harmony & Design sobre mi querida Jane Austen.

Si te gusta encender velas aromáticas en invierno (a mí me encanta), lee antes estos consejos sobre cómo encender y cuidar una vela para que dure más y no pierda su calidad.

Si necesitas una lectura motivadora y que te haga reflexionar, Lara escribió hace un tiempo (bastante) sobre la felicidad interior bruta, una magnitud que deberíamos tener mucho más en cuenta en la vida.

Si, en cambio, piensas que esto del positivismo y el ser feliz por obligación se nos ha ido de las manos, lee este otro post en el que Mireia también reflexiona muy bien sobre esto.

Si estás en modo cinéfilo, aquí tienes 20 películas que se van a estrenar (o ya se han estrenado) este año en el cine y que tienen muy buena pinta. (Por cierto, aún no he visto La La Land, ¡pero de este finde no pasa! ¿Alguien la ha visto ya? ¿Opiniones? Yo ya me sé la banda sonora entera y me encanta :)

Y, para no salirnos del tema cine, si te has quedado con ganas de más películas, aquí tienes otros 20 filmes ambientados en invierno o en climas muy fríos perfectos para ver en estos días heladores. (Yo de esas 20 solo he visto una, Winter's Bone, y me gustó mucho, realmente os la recomiendo)

Por último, si estás planeando un viaje a Dublín (es uno de los destinos que tengo en mente para 2017) o, simplemente, te gusta la fotografía, echa un vistazo a este post en el que Nuria recopila cuentas de Instagram que tienen a la capital irlandesa como protagonista.


¿Qué planes tenéis para este finde? Yo esta tarde voy al teatro, que hace siglos que no lo piso (ups), y ojalá me llegue el tiempo también para ir a ver La La Land, porque me muero de ganas. (Y tengo que corregir exámenes, pero eso me da muuucha más pereza ;)

¡Buen fin de semana para todos!

(Link de las 20 películas para los días de frío vía la newsletter de Hello! Creatividad)

Dime cómo te sientes y te diré qué puedes leer este finde

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Si entre tus propósitos de año nuevo está dedicarte más tiempo a ti misma, lee este post de Anna sobre la importancia de cuidarse. Pura sabiduría, calma y sosiego para empezar con buen pie el fin de semana. (Y recuerda: tómate tiempo para tomarte tiempo)

Si estás planeando ya los viajes del 2017, aquí te dejo dos guías que me han resultado muy interesantes, a la par que diferentes: una de Marrakech y otra de Nueva Orleans.

Si tienes curiosidad por descubrir cómo se gesta la portada de una revista y, además, te apetece hacer un repaso por algunas portadas increíbles, echa un vistazo a este post tan genial que en su día, por falta de tiempo, se me pasó.

Si quieres adentrarte en el universo de Virginia Woolf, para mí una de las mejores escritoras del siglo XX (precursora en tantas y tantas cosas), lee este artículo sobre cómo empezar a leer a esta grande de las letras inglesas.

Sin dejar el feminismo de lado, si quieres saber más acerca de la situación actual de las mujeres en Rusia, no te pierdas este artículo sobre la concepción que siguen teniendo las rusas del matrimonio y las relaciones. Porque el machismo está ahí y es horrible, pero que nosotras mismas lo justifiquemos es todavía peor. Da que pensar y anima a actuar.

Y, por último, si has visto La La Land (y solo si la has visto porque hay spoilers), lee este artículo sobre la oscuridad que subyace en el trasfondo de esta (gran) película y que, en mi opinión, logra hacerla aún más maravillosa. (Porque La La Land es maravillosa y nadie, ni siquiera los diez minutos de lágrimas que en mi caso siguieron a su finalización, va a convencerme de lo contrario)


Espero que hayáis tenido una buena semana y que el finde sea aún mejor. Para mí es puente, así que estoy encantada de la vida. :)
¡Nos leemos pronto!

10 ideas de regalos para gente especial

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El hecho mismo de regalar lleva aparejado que el destinatario sea "alguien especial", alguien a quien apreciamos lo suficiente como para hacerle un regalo. No le regalas algo a alguien que no conoces de nada o a quien no significa nada para ti.

Sin embargo, todos sabemos que hay personas especialmente especiales, si me permitís la cacofonía, gente que da color a tu vida, que te completa y a la que quieres tener siempre cerca. Tu mejor amiga. Tu hermano. Tu hermana. Tu madre. Tu pareja. Tu abuelo. En esos casos, cuanto más personal y detallista sea el regalo, mejor. Porque pensar con detenimiento el mejor regalo para ellos ya es, de por sí, el mejor regalo que puedes hacerles.

Por si andas escaso de ideas, aquí van diez ideas de regalos para mujeres (y también para hombres) con los que, al menos en mi caso, acertarían seguro...





1. Un libro bonito.

Entérate bien de los gustos literarios de esa persona y, una vez los tengas claros, busca una edición especial de alguno de esos libros que tanto le gustan. Un libro ilustrado, una edición antigua, un ensayo sobre un tema que le apasione o un libro de fotografías de esos que hacen bonito sobre la mesa del salón son ideas excelentes.

2. Una tontería que le haga gracia.

Una taza llena de sus gominolas favoritas, una cajita de bombones de chocolate negro porque es su favorito, un bol de palomitas con palomitas de diferentes sabores, DVDs de segunda mano de sus películas favoritas, una carta que le dé ánimos si está pasando una mala racha. Cualquier detalle específicamente pensado para ella o él es garantía de éxito.

3. Una escapada.

O, al menos, la mitad de esa escapada. Regálale los billetes de avión o de tren para recorrer ese sitio que tiene tantas ganas de conocer y, juntos, contratáis el alojamiento y planeáis el viaje.


Una edición limitada de Dyptique, como la vela Rosa Mundi que me regalaron a mí la semana pasada por mi cumpleaños, hace bonito y huele de maravilla.


Foto: UNOde50


Alguna joya de UNOde50. Esta marca nos lo pone fácil en su web, ya que tiene secciones especiales de regalos para mujeres con accesorios diferentes y llamativos, como colgantes, pendientes, anillos y pulseras. Complementos que son una apuesta segura.

6. Una revista hecha con mimo.

Kinfolk, Cereal, The Gentlewoman o Porter son algunas de las revistas más cuidadas y mejor hechas del mercado editorial actual. A mí me parecen un regalo perfecto para cualquier lector voraz de revistas de moda y estilo de vida.

7. Algo comprado en un viaje.

Cualquier detalle comprado en un viaje es especial, porque implica que esa persona te importa lo suficiente como para haber pensado en ella mientras recorrías una ciudad o un país desconocido. Y, además, seguro que es algo original que no puede encontrar aquí, lo que le aportará un valor añadido.



8. Un cuadro o una fotografía.

Si eres un artista, regálale un cuadro pintado por ti o una fotografía tomada por ti. Yo tengo la suerte de tener una hermana que es una artistaza, y el otro día por mi cumple me regaló unas cuantas ilustraciones de mujeres pioneras en sus respectivos campos (Virginia Woolf, Coco Chanel y Alice Guy) que estoy deseando colgar. Si no es el caso, compra alguna lámina o alguna fotografía de un artista local. Siempre es un buen regalo para esa amiga que se acaba de independizar.

9. Una prenda de ropa diferente.

Un top delicado, una camisa bordada, unos zapatos bonitos, un bolso de piel. El truco para acertar regalando ropa es huir de las grandes firmas low cost y acercarse a esas pequeñas tiendas que cuidan al detalle la selección de marcas que ponen a la venta.

10. Algo con lo que vaya a disfrutar.

Un musical. Un partido de fútbol, de tenis o de baloncesto. Una excursión de día a la montaña o a una ciudad cercana. Cualquier experiencia que le guste y que podáis compartir será un gran regalo.


¿Se te ocurren más ideas de regalos para gente especial? ¿Eres de regalar por San Valentín? ¿Recuerdas algún regalo con especial cariño?


Ganas de marzo

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Foto: Madewell

He llevado un mes de febrero bastante de locos. Un mes como esos que tuve durante el primer trimestre de empezar a trabajar en casa a las 5 de la tarde y no parar hasta más de las 11 de la noche. Marzo se avecina un poco parecido con el final de evaluación, pero, a pesar de todo, tengo ganas de marzo.




Foto: @teganlee

Tengo ganas de marzo porque veo que los días ya son más largos, que el sol calienta más y que en nada llega la primavera. Y, por mucho que me guste el frío, eso siempre es una buena noticia.

Tengo ganas de marzo porque va a haber dos estrenos audiovisuales que llevo tiempo esperando: la segunda temporada de Love, que llega a Netflix este viernes, y la versión de La Bella y la Bestia con Emma Watson. Por favor, que sea día 17 ya.

Tengo ganas de marzo porque despediré el mes en Portugal y, aunque el viaje es por trabajo (que en mi caso consiste en acompañar a un grupo de cuarenta y pico chavales de 16 y 17 años de viaje de estudios), volver a Lisboa siempre es, como la primavera, una buena noticia.

Tengo ganas de marzo porque cuando acabe el mes ya prácticamente será Semana Santa, y necesito esas vacaciones tanto como necesitaba un fin de semana de desconexión total en la ciudad más bonita de España (con permiso de Sevilla).

Y tú, ¿de qué tienes ganas?

Obsesiones

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Durante un tiempo, fui mucho de obsesionarme con cosas. Un determinado peinado, un blog, una actriz, un color de uñas, un bolso. Ahora, afortunadamente para mi salud mental (y monetaria), me obsesiono menos. Podría decirse que, en ese aspecto, he madurado.

Sin embargo, esto no quiere decir que, de vez en cuando, no pueda sacarme algo de la cabeza durante días y días y, al final, tenga que darle salida de alguna forma (normalmente comprándolo, si es que se puede comprar).

Estas son algunas de las cosas (materiales e inmateriales) en las que ahora mismo no puedo dejar de pensar. (Además de en poner paréntesis cada dos líneas, parece ser).





Por lo pronto, desde que la semana pasada me llegó un pedido de JD Sports que contenía unas Adidas Superstar con las rayas en plateado, no puedo dejar de mirarlas (mis alumnas tampoco) ni de llevarlas a todas horas. Son bonitas, cómodas (la suela se adapta al pie como la seda) y quedan bien con todo. No sé cómo he sobrevivido sin ellas tanto tiempo.


Foto: Olivia Richardson (vía Into the gloss)

Además, por obra y gracia de Emma Watson y mi querida Maia, vivo sin vivir en mí de tanto leer opiniones y mirar precios y productos de belleza de RMS Beauty. Todo son buenas críticas para esta marca de belleza orgánica cuya creadora, Rose-Marie Swift, es una reputada maquilladora muy concienciada con la importancia de no utilizar según qué ingredientes tóxicos sobre nuestra piel. A mí me tientan su Living Luminizer, el Un Cover-up y su Lip2Cheek. Acabaré cayendo, lo sé. ¿Alguna recomendación?


Ewan McGregor y Mélanie Laurent en Beginners

En enero me propuse ver una película nueva cada semana, para no caer en ver las mismas pelis una y otra vez. Y llevo unas cuantas semanas consiguiéndolo, así que esa es otra de mis obsesiones actuales. Las últimas que he visto y me han gustado han sido Beginners, Una historia casi divertida y, por supuesto, La Bella y la Bestia, que ya he visto en el cine y me ha encantado muchísimo.


Humphrey Bogart e Ingrid Bergman en Casablanca

Y siguiendo con el séptimo arte, he recuperado esa idea que tuve hace un par de años de ponerme al día con el cine antiguo. Y todo porque el protagonista de Atardecer en París, uno de los libros que estoy leyendo ahora, tiene un cine en el que proyecta este tipo de películas, y el libro está plagado de referencias a todas ellas que, debido a mi incultura cinematográfica, no siempre entiendo. A ver si esta Semana Santa, aprovechando las vacaciones, veo alguna. ¿Por cuál empiezo?

Y vosotras, ¿alguna obsesión que queráis compartir con la comunidad? ¡Confesad!

Tres meses

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Foto vía Tumblr

Hoy se cumplen exactamente tres meses desde el último día que escribí aquí. Fue el 21 de marzo, y desde entonces han pasado tantas cosas que no sé ni cómo contarlas ni cómo retomar este espacio que tanto solía gustarme. Porque, en estos 90 días...





He vuelto a Portugal. Me he reencontrado con mi querida Lisboa, las olas del Atlántico en Nazaré me han dejado loca y me he enamorado de la biblioteca del Palacio de Mafra. He viajado a Córdoba. He recorrido las callejuelas de su judería, me he maravillado descubriendo la mezquita y he visto patios cordobeses encalados y llenos de flores de mil colores. Me he reafirmado en la idea de que pocas cosas hay en Andalucía que no merezcan la pena.


Foto vía Tumblr

He leído Atardecer en París (agradable pero mejor La sonrisa de las mujeres), Las vírgenes suicidas, Si esto es un hombre, Querida Ijeawele y Los recuerdos. He revivido mis propios recuerdos. Ahora sonrío con Amor en clima fríoy pienso en qué haría Nancy Mitford si esto o si lo otro. Me he enamorado de las nuevas ediciones de Chimamanda que ha publicado Penguin. He decidido que me voy a autorregalar Americanah el viernes como premio a haber aguantado a mis alumnos todo el año.

He visto Big Little Lies y he pensado que es lo mejor que se ha hecho audiovisualmente (de momento) en este 2017. He empezado a ver Younger y, así a lo tonto, me he tragado ya sus dos primeras temporadas. Muy recomendable para no pensar en nada. Me he enganchado a Juego de tronos (estoy intentando ponerme al día para el estreno de la séptima temporada) y he logrado esquivar los spoilers que ha intentado hacerme mi prima de 12 años.



He pasado (estoy pasando) un calor inhumano. El abanico ha sido una extensión de mi mano. He querido cambiar de profesión una veintena de veces. He abierto (demasiados) frentes profesionales y formativos. He decidido reflexionar y darme tiempo para tomar la decisión más adecuada. Me he dado cuenta de que nunca podré estar 100% segura de haber tomado la decisión más adecuada. He decidido aprender a asumirlo y a vivir con ello.

Ha empezado el verano.

He vuelto.

Nos leemos pronto (espero).

PD. Otros periodos de mi vida: un mes, dos semanas, un verano, un año.

Recomendaciones de julio

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Lo bueno de haber trabajado este curso como profesora en un colegio es que llevo de vacaciones (bueno, en realidad no son vacaciones porque estoy en el paro y sin perspectivas de momento, pero yo me lo tomo así) desde el sábado 1 de julio. Ese primer fin de semana huí a Pamplona para cambiar de aires y este último finde me escapé al Pirineo, pero el resto del tiempo he estado en Zaragoza disfrutando de no hacer gran cosa. Que después de haber estado sin parar durante diez meses no viene nada mal. 

Básicamente, me he dedicado a leer, ver series y películas, ir a la piscina, pasear por mi ciudad... En definitiva, he disfrutado de un mes de vacaciones muy tranquilo (excepto por el incidente con el hombro, ya sabéis).

Y estos son algunos de los descubrimientos culturales que he hecho este mes y que quería compartir con vosotros...





Un libro:

Este mes de julio he leído seis libros (por ahora). Prometo hablaros de ellos más adelante, pero no quería terminar el mes sin recomendaros mi favorito absoluto: Según venga el juego, de Joan Didion. Lo devoré escasamente en dos días porque no podía parar de leer. Me cuesta hablar del argumento, porque no es tanto de qué va la historia en sí sino cómo la cuenta Didion y cómo recrea la atmósfera asfixiante, agobiante, de Los Angeles y el desierto de Las Vegas en los años 70 y que utiliza como metáfora de la realidad igual de agobiante y asfixiante que vive la protagonista. Para mí, una pequeña joya literaria.

Dos series:

Por un lado, Juego de tronos. Ya os comenté que me estaba poniendo al día, y en ello sigo, ya voy por la sexta temporada. Estoy disfrutando mucho de esta serie, que además me encanta porque va mejorando capítulo a capítulo. Por otro lado, me lo he pasado genial viendo GLOW, una nueva serie de Netflix inspirada en la grabación de un programa de lucha libre femenina en Hollywood en los años 80. Una locura muy divertida.

Tres películas en el cine:

Verano 1993 es otra pequeña joya, en este caso audiovisual. Cuenta la historia real de su directora, Carla Simón, quien se quedó huérfana a los seis años y tuvo que trasladarse a un pueblecito para vivir con sus tíos y su prima, que se convirtieron en su nueva familia adoptiva. Visualmente preciosa, tierna, conmovedora y nostálgica, id a verla antes de que gane muchos Goya y todos hablen de ella como si la hubieran visto cuando la estrenaron y fueran los más entendidos del lugar.

No soy muy de películas de acción, pero Baby Driver me flipó. La primera media hora me pareció perfecta, luego tiende demasiado a los tiros y las persecuciones, pero aún así es genial. Y esa banda sonora es el acompañamiento musical perfecto para dos horas de ir al cine a no pensar en nada más.

Por último, Su mejor historia, un filme dirigido por la realizadora de An Education que narra cómo el Ministerio de Propaganda inglés encarga a un trío de guionistas que escriba una película para subir la moral de la población británica en pleno Blitz londinense. Bonita y feminista.

Un plan en Zaragoza:

Visitar la exposición de fotografía de Juana Biarnés "A contracorriente", en La Lonja. Forma parte del certamen de PhotoEspaña 2017 y muestra varias decenas de imágenes tomadas por esta catalana, pionera del fotoperiodismo español, durante los años 60 y primeros 70. Los Beatles, Carmen Sevilla, Tita Cervera, Cayetana de Alba, Raphael o Lola Flores son algunos de los rostros que retrató con gran maestría durante su carrera profesional.

Una escapada para desconectar:

Al Pirineo, concretamente a Jaca y a Pau, en Francia. Estuve el fin de semana pasado y volví como nueva. Cruzar los Pirineos en coche hacia Francia y atravesar esas grandes montañas llenas de distintas tonalidades de verde es de las cosas más bonitas que he hecho en mucho tiempo. Y además Pau, como toda la France, merece la pena.

¿Habéis hecho algún descubrimiento interesante este mes?

Un look para el entretiempo

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Foto vía Tumblr

Yo pensaba que ya estaba, que ya había acabado el verano, que el calor se había ido para no volver. Ilusa de mí.

En Zaragoza vuelve a hacer calor, pero yo ya he hecho el cambio de armario (primer resfriado gordo de la temporada mediante) y me resisto a sacar de nuevo las sandalias y los vestidos de tirantes. Afortunadamente, he dado con el look perfecto para estos días de entretiempo...




Foto vía Pinterest

Vaqueros rectos, camiseta blanca y americana amplia de cuadros grises o con estampado pata de gallo. Se lo he visto a, literalmente, todas las que son alguien en Instagram, y me ha encantado por lo fácil de copiar, lo cómodo que me parece y lo emocionada que estoy porque en las últimas rebajas de invierno de Zara me hice con una americana como estas con un 50% de descuento.

Ya tengo uniforme para estos días de principio de otoño.




Foto de Jeanne Damas vía Tumblr.

¿Alguna otra idea para vestir en estas semanas de entretiempo?

Libros para este otoño

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Este otoño, cuando acabe Americanah, quiero leer Nada, de Carmen Laforet, porque lleva en mi lista de pendientes desde los 16 años y porque me parece que es un libro que pega bastante con el plan de sofá, taza de té y lista tranquila de Spotify. Me espera también Middlesex, de Jeffrey Eugenides, porque dicen que es su mejor obra y yo quiero leer más de esas descripciones suyas tan maravillosas. De la librería Lello de Oporto me traje en agosto El amor de los tiempos del cólera, de García Márquez, y voy a leerlo en los próximos meses porque así me acuerdo del verano y porque es Gabo y no hacen falta más razones para sumergirse en cualquiera de sus historias. También en verano, una mañana de domingo paseando por el mercadillo de la plaza San Bruno, me topé con El regreso, de Rosamunde Pilcher, y lo compré para leerlo en invierno y ser igual de feliz que el año pasado cuando leí Los buscadores de conchas. Si un día necesito darme un capricho literario, me saltaré toda esta lista, iré a una librería y compraré Ciudadanos particulares, de Tony Tulathimutte, cómo para no hacerlo cuando viene recomendado por Blanca y por Maddalen.

De todas formas, es posible que mañana mismo me plante en la biblioteca de mi barrio y me lleve prestado Nosotros en la noche, porque lo descubrí la semana pasada y me fascinó el argumento y porque la peli ya está en Netflix.

Y si, al acabar todos estos, siguen quedando días de frío, leeré algo de Joan Didion, lo que sea, porque solo con que sea la mitad de bueno que Según venga el juego, ya habrá merecido la pena. Después haré lo propio con Modiano, mi francés favorito (con permiso de Marc Levy), porque este año je suis prof de français, et il faut pratiquer.

Viva el caos (literario).

¿Qué lecturas os esperan para las próximas semanas? ¿Qué estáis leyendo o qué habéis leído últimamente?

PD 2. Estoy en Goodreads, por si alguno también estáis por allí y queréis que nos hagamos amiguitos.

Dime cómo te sientes y te diré qué puedes leer este finde

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Foto vía Tumblr

Si necesitas aumentar tu creatividad, ya sea por trabajo o por afición, a lo mejor tienes que plantearte un pequeño cambio en tus hábitos alimentarios y empezar a incluir en tu dieta alimentos como los arándanos, el aguacate, el brócoli o una buena copa de vino tinto. Palabra de las mayores expertas en creatividad del mundo online, las chicas de H!C.

Si el otoño te ha puesto nostálgica, no te pierdas este bonito texto que Maddalen dedicó hace unas semanas a su bar, ese en el que pasó tantas noches hace unos años y con el que se reencontró por casualidad. Todos tenemos un lugar así, y por eso merece la pena leer este humilde homenaje, que es el suyo, pero que todos hacemos nuestro.

Si eres madre, profesora, monitora o, simplemente, pasas mucho tiempo con niños y adolescentes, echa un vistazo a estas cinco maneras de educar a los niños en el consentimiento. Me parece de vital importancia para evitar abusos en el futuro.

Si estás buscando nuevas lecturas pero el ritmo frenético del curso te impide embarcarte en una novela larga, mira estas seis propuestas de libros que cuentan una historia redonda en unas 150 páginas. (Joyita, Joyita, Joyita).

Si tienes ganas de fin de semana de sofá, televisión y manta pero ninguna serie acaba de engancharte, a lo mejor te interesan estos documentales. Por mi parte, te recomiendo Chef's Table France, en Netflix. Lo estoy viendo para practicar el idioma y estoy muy enganchada a la cuisine française.

Por último, si te apasiona el mundo de la belleza, la cosmética y el maquillaje, lee cualquiera de los artículos de Into The Gloss, para mí la mejor web de belleza que existe en la actualidad. Yo devoro sus newsletters semanales y busco información de todos casi todos los productos que recomiendan.


(¡No publicaba un post de enlaces desde enero! Madre mía...).

Buen fin de semana para todas. :)


Qué he leído últimamente

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Foto vía Tumblr ARDW

Justo ayer comentaba con mi amiga Elena que, como ambas estamos tan enganchadas a OT, nos pasamos las noches viendo vídeos de Amaia, Aitana y compañía en lugar de capítulos de todas esas series que nos gustan. Pero este retorno a mi adolescencia tiene un lado positivo, y es que ver vídeos cortos de chavales cantando, tocando el piano y la guitarra o sacándose puntos negros (gracias, Amaia y Roi, por ese gran momento) me deja también tiempo para leer un rato largo antes de dormir. Y por eso, entre noviembre y principios de enero, he leído todos estos libros...





- Americanah, de Chimamanda Ngozi Adichie.

En realidad, Americanah lo empecé a finales de agosto, por lo que me ha costado lo suyo leerlo, pero esto me ha permitido pasar tres meses maravillosos junto a Ifemelu y Obinze, dos jóvenes nigerianos que viven una gran historia de amor a lo largo de tres décadas y de otros tantos continentes. Una historia de esas que no se olvidan fácilmente por lo bien escrita y lo diferente, pero al mismo tiempo familiar, que resulta lo que en ella se cuenta.

- Nieve en otoño, de Irène Némirovsky.

Una novela corta que cuenta la historia de una anciana que ha servido durante toda su vida a una rica familia rusa y que, tras la Revolución de 1917, los sigue en su exilio a París. No es Suite francesa -para mí una obra maestra-, pero la habilidad de Némirovksy para retratar personajes, espacios y sentimientos también está presente en este relato.

- El niño perdido, de Thomas Wolfe.

Otra novela corta muy bonita y muy bien narrada en la que se recuerda al hermano muerto del autor a través de varias voces narrativas, en diferentes momentos y desde distintas perspectivas. Una de esas joyas literarias que aguardan a ser descubiertas y rescatadas del polvo de las estanterías de cualquier biblioteca de barrio.

- Nada, de Carmen Laforet.

Cuenta la historia de Andrea, una huérfana de 18 años que llega a la Barcelona de la posguerra para estudiar en la universidad. Se instala en casa de sus parientes en la calle Aribau, y allí se encuentra con una atmósfera sofocante y claustrofóbica que choca con la idea que se había formado de lo que iba a suponer su ansiada "libertad". Una historia muy personal y especial.

- Nosotros en la noche, de Kent Haruf.

Una novela breve y concisa que narra la historia de Addie y Louis, una pareja de ancianos que un día deciden empezar a pasar las noches juntos para aliviar su soledad. Conmovedora, agridulce y bien contada.

- El cuento de la criada, de Margaret Atwood.

De momento, el gran descubrimiento literario de los últimos meses (con permiso de Chimamanda). Distopía que narra cómo es la vida en la sociedad de Gilead, donde las mujeres se han visto despojadas de sus derechos y unas pocas, conocidas como criadas, solo son útiles en tanto que vientres de alquiler. Bien escrita, interesante, con temas para reflexionar y, por supuesto, algo aterradora, sobre todo cuando uno piensa que todo, absolutamente todo lo que cuenta Atwood, tiene un sustento histórico.

¿Qué habéis leído vosotros en los últimos meses? Yo ahora estoy con Mujeres que compran flores, de Vanessa Montfort, una lectura muy agradable que pone a la experiencia femenina como protagonista absoluta de la historia.

Mis 10 imprescindibles de belleza

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Foto vía Studded Rose

Leer artículos y posts de belleza es uno de mis pasatiempos favoritos desde hace muchos años. Devoro las historias de Ana Morales para Vogue.es, leo a conciencia todo lo que escribe Paloma Sancho en Telva, soy una gran fan de los beauty uniforms de Cup of Jo y abro cada uno de los enlaces de la newsletter semanal de Into The Gloss.

Sin embargo, por aquí pocas veces he hablado de belleza (bueno, últimamente ni de belleza ni de nada en general). Así que hoy, que tengo tiempo porque es mi última tarde libre antes de ponerme a corregir exámenes como si no hubiera un mañana, he decidido recopilar mis diez productos de belleza favoritos, los que compro una y otra vez en cuanto se me acaban porque necesito esos y no otros, y compartirlos con vosotras. Ahí van...




Foto vía La cool & chic


Hace años (antes de que se pusiera de moda), leí en Telva un artículo sobre la doble limpieza facial que realizan las coreanas, y me encantó la idea porque mi piel siempre ha tenido una tendencia desmesurada a acumular dentro de sí todas las impurezas del mundo mundial. En lugar de salir hacia fuera, la suciedad acumulada durante el día decide que dentro de mi piel se está muy a gusto y que lo mejor es quedarse ahí debajo en forma de puntos negros o, más habitualmente, de pequeños quistes. Así que en seguida me apunté a eso de usar primero un producto para eliminar el maquillaje y luego otro para limpiar la cara. Al principio usaba leche desmaquillante, pero tardaba mucho y me cansaba. Luego probé el aceite y me di cuenta de que no era para mí. Entonces decidí probar el agua micelar y me convertí en una creyente.

La de Bioderma, especial para pieles sensibles, la utilizo por la noche para desmaquillar tanto la cara como los ojos. El maquillaje lo retira muy bien, y la máscara de pestañas (si no es waterproof) también. No irrita nada los ojos, y esto lo dice alguien que ha llorado mucho desmaquillándose los ojos porque prácticamente todos los desmaquillantes de ojos me escocían.


Lo uso por las noches después del agua micelar. Limpia los poros en profundidad, pero no deja sensación de tirantez o de sequedad. Por la mañana, prefiero utilizar un gel más suave, como el Face Wash de Dr Jackson o su equivalente barato de propóleo y lima de Apivita (sí, me encanta el olor a cítricos a primera hora de la mañana).


Harta de seguir teniendo granitos y espinillas a mi edad (tengo 29 años), el pasado mes de diciembre fui a la dermatóloga, quien me diagnosticó de acné adulto (lo que no tuve especialmente de adolescente lo tengo ahora, ¡yuhuuu!) y me recomendó la crema hidratante Neostrata HL. Cuando compré el bote y vi que ponía "Antiarrugas", casi me da un soponcio. A mis 28 años, ¡crema antiarrugas! Como diría la vecina rubia, me precipito de la vida. Pero ahora estoy encantada. Me hidrata muchísimo la piel sin dejar sensación grasa ni pegajosa, es oil free y tiene protección solar. Ya voy por el segundo bote.


Ahora ya me compro el tarro grande porque me sale más a cuenta. Con eso os lo digo todo.

5. Bálsamos labiales varios.

Varios, pero siempre los mismos, en realidad: el de Kiehl's de toda la vida (big fan de Kiehl's, ya sabéis), el de cereza de Liposan, los de Lipstick Queen en rosa y coral y, para la noche, el Ictyane de Ducray para labios dañados. Mano de santo.



6. Esmaltes de uñas de Essie.

Mis favoritos: Cute as a button para el verano, Fifth Avenue para cualquier época del año y Wicked y Midnight Cami para otoño e invierno.


Llevaba años usando el colorete Orgasm de Nars, pero ahora he descubierto el Multiple Stick en el mismo tono y ya no pienso usar otra cosa. Sirve para las mejillas, los ojos y los labios (a mí en labios no me gusta, pero en ojos y mejillas sí) y lo que hace es dar color e iluminar. Queda muy natural. Por no mencionar que se aplica en segundos y es imposible dárselo mal.

8. Primer POREfessional y polvos matificantes POREfessional Agent Zero Shine de Benefit.

Tengo la piel mixta y los poros algo abiertos (podía ser peor, pero también podría ser mejor) en la zona T y la parte de las mejillas cercana a la nariz. Por eso llevo tiempo usando el primer POREfessional de Benefit, que borra al instante los poros para que el maquillaje quede mucho mejor. A eso le he añadido ahora los polvos matificantes de la misma línea, que obran MAGIA y eliminan TODOS ESOS BRILLOS HORRIBLES que me salen en la cara unas cuantas horas después de haberme maquillado, use el producto que use. (Me he dado por vencida respecto al hecho de buscar productos que no me generen brillos, así que simplemente me echo los polvos por encima et voilà).


De toda la lista, creo que es el producto que más años llevo usando. Un imprescindible para tapar los granos sin ahogarlos y, en teoría, curándolos a la vez (digo en teoría porque yo esto no lo noto, pero los tapa, que es lo importante).


Decidme, ¿cómo hemos podido sobrevivir tantos años sin champú seco? Personalmente, desde que descubrí este de Batiste hace ya un tiempo, se ha convertido en un gran imprescindible entre mis productos de belleza. Permite espaciar un poco más los lavados y deja un aroma a coco en el pelo de lo más agradable.

Bonus track:

Otros productos de belleza que considero básicos en mi rutina diaria pero que no tienen nombre y apellido porque aún no he encontrado a los definitivos son: el corrector de ojeras, la máscara de pestañas (he probado de Sephora, Maybelline, Benefit, Make Up Forever... pero ninguna acaba de convencerme. ¿Sugerencias?), la BB Cream (era fiel a la de Kiehl's y también me encanta el "Un" Cover-up de RMS, pero ahora quiero alguna que sea oil free), el tónico (estoy usando coreanos últimamente), un exfoliante para la cara (ahora mismo me gusta mucho la microdermoabrasión de Kiehl's, que uso una vez por semana) y mascarillas varias (la Rare Earth y la de caléndula y aloe de Kiehl's, las coreanas...).

¿Cuáles son vuestros imprescindibles de belleza? Ya veis que el tema me gusta bastante, así que me encantaría saber (y probar).

Los libros de 2018 (en cifras)

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Chica leyendo en cafetería

- 22 libros he leído (completos).

- 18 escritos por mujeres: las cuatro excepciones son La mirada de una mujer, de Marc Levy, Lejos del corazón, de Lorenzo Silva, Rimas y leyendas, de Gustavo Adolfo Bécquer, y Sherlock, Lupin y yo 1: El trío de la dama negra.

- 4 escritos por Nora Roberts: los de la serie Cuatro bodas.


- 2 novelas de literatura juvenil que he leído a la par que mis alumnos de 2º ESO: Pomelo y limón, de Begoña Oro, y Sherlock, Lupin y yo 1: El trío de la dama negra.

- 5 libros del #SandRBookClub, el club de lectura de Nuria Pérez en Instagram: Tea Rooms, de Luisa Carnés, Del color de la leche, de Nell Leyshon, Amy e Isabelle, de Elizabeth Strout, Río revuelto y La primera mano que sostuvo la mía, de Maggie O'Farrell.

- 1 libro en inglés: How to be famous, de Caitlin Moran (la segunda parte de Cómo se hace una chica).

- 1 primera frase para recordar siempre: la de Un debut en la vida, de Anita Brookner. (La oración en cuestión: "A sus cuarenta años, la doctora Weiss comprendió que la literatura le había destrozado la vida").

- 2 libros empezados y no acabados (2019 será vuestro año, lo prometo): Ordesa, de Manuel Vilas, y Las chicas de campo, de Edna O'Brien.

- 3 libros que me han emocionado: Del color de la leche, Amy e Isabelle y La primera mano que sostuvo la mía.

- 1 favorito (y el primero que leí en 2018): El cuento de la criada, de Margaret Atwood.





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